Control mundial de la peste porcina africana

Una iniciativa del Programa Global para el Control Progresivo de las Enfermedades Animales Transf ronterizas (GF‐TADs)

AXON COMUNICACION, Control mundial de la peste porcina africana
Llamado a la acción

La peste porcina africana (PPA) es una enfermedad infecciosa que afecta a cerdos domésticos y silvestres. En los últimos años, el número de países o territorios afectados por la PPA se ha incrementado con la notificación de países del África subsahariana, Europa y Asia.

Conscientes de que en la actualidad el riesgo es aún mayor para todos los países y del significativo impacto de la enfermedad en la sanidad y el bienestar animal, la seguridad alimentaria, las economías nacionales y mundiales, el desarrollo rural, así como a nivel político y social, se lanzó un llamamiento en la 87 a Sesión General de la Asamblea Mundial de Delegados de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) en favor de una iniciativa mundial para controlar la PPA.

En la Resolución n o 33 de la 87 a Sesión General se reconoció la complejidad que presenta la PPA y, por consiguiente, que la respuesta a dicha enfermedad requiere un enfoque multisectorial y la cooperación de diferentes instituciones.

Se señaló también la colaboración de larga duración entre la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y la OIE mediante el apoyo a sus miembros en la gestión de riegos relacionados con la sanidad animal. La resolución identificó el papel fundamental que desempeñarán los países, la FAO y la OIE en el control mundial de la PPA. Lo que incluye el imperativo de que la PPA se considere una enfermedad que requiere una gestión de riesgos adecuada mediante el desarrollo y mejora de programas nacionales de control, y la necesidad de reconocer la información sobre el riesgo como componente indispensable para dar una respuesta efectiva a las vías de riesgo y a las prácticas de alto riesgo. Se animó también a los países a que mantuvieran la transparencia mediante una puntual notificación de la enfermedad y gestionaran el riesgo implementando normas internacionales y aplicando medidas de comercio basadas en las mercancías.

La resolución encomendó a la OIE, en colaboración con la FAO, la puesta en marcha de una iniciativa para el control mundial de la PPA. Se consideró que el Programa Global para el Control Progresivo de las Enfermedades Animales Transfronterizas (GF-TADs, por sus siglas en inglés) era la plataforma adecuada para el desarrollo y fomento de colaboraciones nacionales, regionales y mundiales cuyo objetivo no es otro que incrementar las medidas de prevención y de preparación, y reducir los efectos adversos de la PPA en la sanidad y el bienestar de los cerdos y en el comercio internacional.

La FAO y la OIE han de identificar y definir, conforme a las directrices y las normas internacionales relevantes, las líneas directrices y los factores de éxito que requiere el control mundial de la PPA , entre ellos se incluirán mecanismos de mejora de la capacidad de los países para controlar la PPA, una coordinación y cooperación más estrechas de las principales partes interesadas del sector público y privado, así como la reducción de las consecuencias de la PPA a través a la continuidad de la actividad comercial.

 

Retos estratégicos para el control mundial de la PPA

No existen precedentes de una propagación tan amplia de la peste porcina africana, por lo que no se debe subestimar la magnitud de los retos nacionales y regionales a los que habrá que enfrentarse para controlar1 esta enfermedad. El compromiso a largo plazo de todas las partes implicadas será imprescindible en la lucha frente a esta amenaza.

Pese a la complejidad y dificultad que entraña este desafío, el control mundial de la PPA es factible, aunque su éxito y sostenibilidad son improbables sin la determinación y el esfuerzo de los países. Serán necesarias medidas de control coordinadas a nivel regional y global integradas en marcos de trabajo supranacionales que atiendan las diversas necesidades socioculturales, geográficas, políticas y económicas, y las características de cada región. Lo que habrá de conseguirse mediante la colaboración con distintas agencias internacionales, regionales y nacionales, así como con las organizaciones interesadas, y con los sectores público y privado trabajando en estrecha colaboración en el logro de objetivos comunes.

Ya existen normas internaciones para el control de la PPA, así como una experiencia y conocimientos que contribuyen a su implementación. Sin embargo, la principal causa que ha obstaculizado hasta el momento la eficacia y eficiencia del control de la enfermedad a nivel nacional, regional e internacional es la dificultad a la hora de implementar estas recomendaciones internacionales en razón de la gran diversidad y complejidad de situaciones a las que se enfrentan los países.

Fuente: https://axoncomunicacion.net

 

Share